Rodrigo Paris, nació en Madrid en 1979. Como científico y doctor en química, ha trabajado en diferentes universidades y centros de investigación a lo largo de su carrera, con un gran número de artículos científicos, patentes, etc. en el campo de los materiales. Sin embargo, hace unos años se especializó en técnicas de innovación y emprendimiento que, junto con circunstancias personales, le llevaron a empezar un proceso de mejora personal y que culminó con un cambio de rumbo profesional, para enfocarse en ayudar a los demás a través de invertir en empresas sociales con foco en cambio climático, y la publicación de su primer libro Cuando decides mejorar donde muestra distintas reflexiones y herramientas de progreso personal previamente validadas. Tras la gran experiencia como autor y divulgador, presenta su primera novela donde pretende reflexionar, despertar conciencias y mostrar distintas realidades a través de una historia tan surrealista y disparatada como el estudio de la especie humana por parte de un ser mucho más avanzado.
P.- ¿De qué trata tu novela, Rodrigo?
R.- Se trata de un extraterrestre que viene a la Tierra a estudiar el comportamiento de los humanos en este periodo de cambio hacia una sociedad cada vez más tecnológica. Pero decide hacer el estudio no solo como mero espectador, sino haciéndose pasar por humano para poder interactuar y obtener información de mayor valor. Para ello, tiene que aprender a comportarse como nosotros y lo va consiguiendo gracias a que puede introducirse en distintos individuos e ir buscando este aprendizaje. Desde luego es una novela totalmente surrealista, diría que con mirada ácida, inteligente y a veces graciosa trata de que nos conozcamos a nosotros mismos basándonos en el estudio que hace este ser superior y que va a anotando en su diario.
P.- ¿Por qué quisiste que el protagonista fuese un extraterrestre?
R.- Uno de mis mayores aprendizajes es que todo es relativo y depende del ángulo con el que mires las cosas. Pues bien, teniendo esto en cuenta era necesario situar al espectador en una nueva perspectiva que le invitara a ver los problemas cotidianos de una manera distinta y, de esta forma, ser capaz de relativizar los problemas que todos tenemos. La mejor manera que se me ocurrió es que fuera alguien tan ajeno a los humanos como un extraterrestre.
R.- Se trata de un extraterrestre que viene a la Tierra a estudiar el comportamiento de los humanos en este periodo de cambio hacia una sociedad cada vez más tecnológica. Pero decide hacer el estudio no solo como mero espectador, sino haciéndose pasar por humano para poder interactuar y obtener información de mayor valor. Para ello, tiene que aprender a comportarse como nosotros y lo va consiguiendo gracias a que puede introducirse en distintos individuos e ir buscando este aprendizaje. Desde luego es una novela totalmente surrealista, diría que con mirada ácida, inteligente y a veces graciosa trata de que nos conozcamos a nosotros mismos basándonos en el estudio que hace este ser superior y que va a anotando en su diario.
P.- ¿Por qué quisiste que el protagonista fuese un extraterrestre?
R.- Uno de mis mayores aprendizajes es que todo es relativo y depende del ángulo con el que mires las cosas. Pues bien, teniendo esto en cuenta era necesario situar al espectador en una nueva perspectiva que le invitara a ver los problemas cotidianos de una manera distinta y, de esta forma, ser capaz de relativizar los problemas que todos tenemos. La mejor manera que se me ocurrió es que fuera alguien tan ajeno a los humanos como un extraterrestre.
P.- ¿Cómo es Etolo, qué aspectos destacarías de él?, ¿crees que el lector puede empatizar con él?
R.- Creo que con Etolo se empatiza desde el primer momento en que decide llorar durante 5 minutos porque se arrepiente de venir a la Tierra. Etolo es la figura clásica del sabio despistado, que provoca situaciones desternillantes. Pero es algo más, es un científico como yo, que intenta aprender y comprender el mundo que le rodea, incluso con experimentos radicales. Pero, además, es un ser evolucionado y bondadoso que busca compartir su conocimiento para la mejora del resto de especies.
R.- Creo que con Etolo se empatiza desde el primer momento en que decide llorar durante 5 minutos porque se arrepiente de venir a la Tierra. Etolo es la figura clásica del sabio despistado, que provoca situaciones desternillantes. Pero es algo más, es un científico como yo, que intenta aprender y comprender el mundo que le rodea, incluso con experimentos radicales. Pero, además, es un ser evolucionado y bondadoso que busca compartir su conocimiento para la mejora del resto de especies.
P.- Es imposible no acordarse de Sin noticias de Gurb, de Eduardo Mendoza. ¿Crees que el lector también se va a reír con las aventuras de Etolo?
R.- Este libro es uno de mis favoritos y en él se basa mi novela, de hecho, el nombre de Gurb aparece varias veces al ser amigo de Etolo. La idea que me planteé era poder ayudar al desarrollo personal, pero mediante una lectura amena y divertida, como es Sin noticias de Gurb. Creo que el lector se va a reír por lo absurdo y surrealista de sus comentarios, y estaría más que satisfecho si la gente se riera al menos una cuarta parte de lo que yo me reí con la novela de Mendoza.
P.- Hay cientos de novelas que tratan sobre extraterrestres vengativos y colonizadores que atacan la Tierra. Pero Etolo es distinto. ¿De qué otras novelas podrías hablarnos que tratan al «extranjero» desde un punto de vista amable y divertido?
R.- Etolo es totalmente distinto, él/ella viene con la intención de no interferir, ya que solo le interesa conocernos, aunque muchas veces le cuesta conseguirlo. Respecto a novelas de esa temática te voy a ser sincero, leo poca novela como para dar algún consejo al respecto. Dicho esto, de los libros que he leído estos dos últimos años resaltaría: El monje que vendió su Ferrari, El líder que no tenía cargo y Tu segunda vida empieza cuando descubres que solo tienes una, que son libros de desarrollo personal escritos en forma de novela y en donde aparecen extranjeros muy amables. Por otra parte, también dos novelas geniales de escritores noveles donde, aunque no divertidos, los extranjeros aparecen como personas simpáticas, sabias y amables: Transhumanos y Miroir.
R.- Todo lo que recaudes del libro va destinado a la Asociación Afanias, referente en la discapacidad intelectual, ¿qué te une a esta asociación?
P.- Todos los beneficios de mi primer libro Cuando decides mejorar, escrito en 2019, van destinados a esta asociación. Yo soy una persona que colabora con distintas ONG, trabajo en una fundación y conocía a una amiga que me puso en contacto con ellos y decidí aportar mi granito de arena a su propósito poniendo el libro a su disposición. No me une nada más. Con Etolo se destina un euro por cada ejemplar para fines sociales, pero en este caso para ayudar a la Cruz Roja en la ayuda contra el coronavirus y los efectos que va a tener en el futuro.
P.- Esta es la primera novela que escribes. Anteriormente has escrito libros sobre desarrollo personal y autoayuda, ¿cómo has unido ambos campos, el de la ficción y la no ficción?
R.- Es lo que te comentaba anteriormente. Para libros de desarrollo personal, como el primero mío, tienes que estar muy dispuesto a ello o ser mi amigo para leerlo. Por eso la idea de este proyecto era escribir una novela divertida y fácil de leer, pero que además tuviera por detrás un trasfondo que invitara al lector a reflexionar sobre ciertos puntos lo que, a su vez, puede contribuir a su propio desarrollo. Digamos que el libro es de desarrollo personal escrito en forma de novela surrealista de ficción para, además de pensar, pasar un buen rato.
P.- Has publicado con Lidera Editorial. Cuéntanos qué tal ha sido la experiencia y si la recomendarías.
R.- Todos mis libros los he publicado con ellos. El hecho de repetir de nuevo con Etolo muestra que la experiencia ha sido muy buena y que les recomiendo. Tengo muy buena sintonía con Luis que, por cierto, aparte de una gran persona es también un escritor fantástico.
P.- ¿Cómo te ha afectado el confinamiento como escritor?
R.- Yo no soy escritor profesional, así que en ese sentido no me ha afectado.
P.- ¿Has aprovechado el tiempo para leer o escribir más?
R.- Sí, he aprovechado para leer un poco más los fines de semana. Entre semana mi ritmo de vida se ha visto poco afectado, la verdad.
P.- ¿Nos podrías recomendar una novela de humor para estos malos momentos que estamos viviendo?
R.- Como te decía no leo mucha novela, pero siempre he recomendado y recomendaré Sin noticias de Gurb para pasar un rato divertido. Siempre me acordaré la primera vez que lo leí, iba en el metro muerto de risa y la gente me miraba como si estuviera loco. Ese momento fue inolvidable para mí y lo recordaré siempre. Nunca me había pasado con un libro.
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